domingo, 4 de septiembre de 2011
VACÍO
Me he dormido en el sofá. Tenía que hacer alguna llamada telefónica y cenar algo, pero al final el teléfono ha enmudecido y mi estómago se ha quedado vacío. No recuerdo lo que he soñado. Mi hijo debe estar durmiendo desde hace horas en su lecho blanco, soñando con videojuegos y trucos de magia y hablando en sueños. Las páginas en blanco son increíblemente difíciles de llenar de palabras. Al final acaban esparcidas por el suelo de la habitación. La papelera está llena de papeles arrugados, envoltorios de barritas de cereales y latas de coca cola vacías. He terminado de leer " La tregua" de Primo Levi. Secret garden ha sonado una y otra vez; obsesivamente, en el lector de cedés.
Se fué el sábado y la promesa del lunes se cierne como una sombra alargada que terminará por alcanzarme. Hace horas que anocheció, hace frío y no puedo bajar del todo la persiana de la ventana para no cargarme el nido que las golondrinas han instalado en el hueco. Ahí afuera maulla un gato.
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¿Ficción mezclada con algo de realidad?
ResponderEliminarMe gusta el detalle de la persiana. Respecto al resto, estoy en la fase opuesta a la que describes pero sé muy bien lo que es, cuando está ahí dentro pero no quiere salir. ¿No te iría bien hacer algo diferente? (Miau)
Detalles de unos instantes que parecen muy reales.A veces lo dificil, es cierto, enfrentarse al papel en blanco, pero si no hay inspiración no pasa nada.
ResponderEliminarEstoy de regreso y paso a saludarte.
Montse: más bien realidad con algo de ficción. Ya he visto que estás en la fase opuesta, hiperactiva y creativa a más no poder. Tendré que hacer algo con la persiana pero esperaré a que se marchen las golondrinas.
ResponderEliminarAnna: Parecen reales porque lo son. Intento escribir siempre que puedo, con y sin inspiración. Me alegro de tu vuelta.
No sabes como me suena esto, lo que pasa es que tú lo has conseguido llevar a la pantalla/papel. Por lo menos aquí está esta entrada.
ResponderEliminarBesitos
Sobra con una palabra: impresionante.
ResponderEliminarElysa: A todos los que escribimos cotidianamente, aunque sea sin pretensiones, nos suena esto. No saber por donde empezar o cómo explicar lo que nos pasa por la cabeza...yo sólo lo he definido con pinceladas cortas.
ResponderEliminarMarlene: Eres tan benévola que también me has impresionado. Gracias ;-)
Hola paso a conocerte te ví en mis seguidores,bienvenida!,bueno respecto a lo que dijiste que más decir que lo bueno de las páginas blancas esque siempre se pueden llenar de palabras,y mejor si no son forzadas y se dan solas...si obvio hablo en doble sentido siempre refiriendome tb a la vida.
ResponderEliminarSaludos!.
Desvariada: Sí, la vida es una hoja en blanco pero esa se escribe sola. Nosotros sólo podemos cambiar el argumento, aunque siempre acaba con un deus exmachina. Bienvenida y gracias por tu comentario.
ResponderEliminarPues así es la vida del intelectual. Interesante post. Saludos.
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