SOBRE FINANCIEROS Y SINVERGÜENZAS

Dicen los políticos que "sería contraproducente nombrar una comisión de investigación" para que aclare qué ha pasado con Bankia. Qué responsabilidades tiene cada cual en el hudimiento de ese banco que según Esperanza Aguirre estaba presidido por una persona de probada experiencia y reconocido prestigio en el ámbito económico internacional, porque yo soy de los que hacen memoria y recuerdo que más o menos eso fue lo que dijo cuando su gobierno en la comunidad de Madrid nombró a Rodrigo Rato para el puesto de patrón. Me quieren convencer ahora de que a veces, en una sociedad democrática, conocer la verdad puede ser contraproducente, pero lo malo es que por desgracia empiezo a creérmelo porque imaginad que se descubriese que Rodrigo Rato y sus colegas del consejo de administración de Bankia se corrían fiestas con caviar iraní y jovencitas recién llegadas a la mayoría de edad y que después se desplazaban en jets privados a una isla privada en el Peloponeso donde cazaban panteras de las nieves traídas especialmente del Tibet y soltadas en las montañas de la isla en cuestión, donde se habían instalado miles de cañones de nieve para recrear artificialmente su hábitat original. Todo ello apuntado escrupulosamente en las cuentas de gastos del banco. Se puede pensar que tengo demasiada imaginación (y es verdad, seguramente), pero hay que recordar que estamos en un país donde el rey se ha ido a cazar elefantes en medio de la que está cayendo o donde el presidente del consejo del poder judicial presuntamente se corría viajes a Benidorm o a Marbella a cuenta de tus bolsillos y de los míos. Ahora empiezan a conocerse las cifras con las que se indemnizará a los directivos de Bankia por el trabajo bien hecho. Catorce millones y medio de euros le van a dar al segundo de a bordo. Está claro que no va con él lo de la reforma laboral y los veinte días por año trabajado. Y se escudan en que es legal, pasando por alto que puede que lo sea pero que es del todo inmoral cuando supongo que no han paralizado la ejecución de las hipotecas de Bankia a quienes sin tantas prebendas como sus directivos, están a punto de perder sus hogares porque no les llega para pagar los préstamos que tan alegremente les concedieron. Y mientras, el drama del paro está llegando a límites increibles, cierran plantas de hospital, despiden maestros, suben las tasas de la universidad, hacen pagar las medicinas a los pensionistas, recortan derechos laborales, despiden médicos de atención primaria y eliminan el palito de encima de la eñe para ahorrar tinta. Me jode por los que una vez más van a irse de rositas y con los bolsillos llenos mientras nosotros tenemos el cinturón tan apretado que se nos clava en las costillas, pero no investiguen por favor, no quiero saber la verdad, me temo que tienen razón estos políticos visionarios e incomprendidos. No quiero saber la verdad para que el pirómano de cajeros automáticos que llevo dentro no haga de las suyas y verme entre rejas dentro de cuatro días sin políticos ni financieros que me acompañen.